Preciosa ánfora de forma clásica y con tapa, fabricada con métodos artesanales en porcelana china blanca y azul. Esta antigua pieza pertenece a la época de la Dinastía Qing, habiendo sido realizada entre los siglos XVIII y XIX. La Dinastía Qing fue la última de las dinastías imperiales chinas y duró desde el año 1664 hasta el 1912, cuando el último emperador, Puyi (conocido como Emperador Xuantong), abdicó. Esta pieza de porcelana llama la atención por el buen estado en el que ha llegado a nuestros días a pesar de su antigüedad, y gracias al cual nos es posible disfrutar de su bella forma y de su cuidada decoración. La porcelana blanca de la que está hecha la pieza ha sido decorada a mano con esmalte azul. Los motivos que se reproducen en ella son sencillos y están trazados con frescura y habilidad. En uno de los lados del ánfora aparecen representados dos personajes vestidos con ropas tradicionales. Uno de ellos va montado sobre un león budista y el otro porta una especie de farolillo o estandarte. Tras ellos se ve el tronco de un gran árbol que les cubre con sus ramas, una de las cuales se prolonga hasta terminar en la tapa. Tras los personajes también se aprecia una especie de barandilla. El otro lado del ánfora está en blanco y en él sólo aparece representado un elegante símbolo de escritura china, trazado con toda la habilidad de un auténtico maestro de la caligrafía. En la base del ánfora hay dos líneas paralelas azules, mientras que en su parte superior distinguimos una cenefa clásica. La boca del ánfora, la base y el borde de la tapa muestran la marca del horno, el característico tono oscuro producido por el calor generado durante el proceso de cocción de las piezas. Esta antigua y hermosa pieza es, sin duda, el complemento ideal para la mejor colección o el salón más exótico. Medidas: 220 mm ancho x 220 mm alto.