Medallón de San Miguel Arcángel, Escuela Cuzqueña, Plata, Primer Tercio del Siglo XX

Antiguo Medallón de Plata con Imagen de San Miguel Arcángel, Escuela Cuzqueña, Primer Tercio del Siglo XX

Este hermoso medallón de plata, una joya representativa de la Escuela Cuzqueña, proviene del primer tercio del siglo XX, destacándose por su admirable trabajo en el diseño y la devoción que refleja. La pieza está compuesta por una estructura sólida de plata cuidadosamente trabajada, con detalles de gran fineza que exaltan su carácter sagrado y artístico. La figura central es una pintura excepcionalmente bien conservada de San Miguel Arcángel, uno de los santos guerreros más venerados en la iconografía cristiana, quien aparece representado en plena batalla espiritual, símbolo de protección y justicia divina. La imagen pintada muestra los rasgos característicos de la Escuela Cuzqueña, con colores vivos y detalles minuciosos, rescatando la tradición y el estilo mestizo que ha sido tan influyente en el arte colonial latinoamericano.

El medallón conserva un encanto especial debido a su antigüedad y al cuidadoso tratamiento de la plata, que, aunque pueda presentar ligeros signos de desgaste propios del tiempo, mantiene su brillo y elegancia, reforzando el atractivo visual y espiritual de la pieza. Su tamaño es ideal para llevar al cuello o para ser utilizado como parte de una colección de devocionales antiguos.

Esta pieza no solo es un testimonio de la fe y la devoción, sino que también es una verdadera joya de orfebrería que evocará un profundo respeto y admiración en quienes la posean. Su presencia destacará en cualquier entorno, aportando un toque de historia y espiritualidad que complementa una colección privada.

Medidas: Alto hasta el enganche: 6.6 cm (2.6 in). Alto sin el enganche: 4.6 cm (1.8 in). Ancho: 3.6 cm (1.4 in).

Historia de San Miguel Arcángel

San Miguel Arcángel es una de las figuras celestiales más importantes dentro de la tradición cristiana, mencionado en las Escrituras como el gran defensor del pueblo de Dios y líder de los ejércitos celestiales. Su nombre significa "¿Quién como Dios?", un recordatorio de su misión de oponerse al mal y preservar el orden divino. A lo largo de la historia, ha sido venerado como protector contra las fuerzas del mal, y su imagen ha estado presente en altares, templos y, como en este caso, en objetos devocionales que acompañan a los fieles en su vida cotidiana. La representación de San Miguel en el arte sacro se ha adaptado a diferentes estilos y épocas, siendo particularmente popular en el arte barroco y la Escuela Cuzqueña, donde se le muestra en actitud heroica, enfrentando al dragón o sosteniendo una balanza, símbolo de justicia.

La Escuela Cuzqueña, surgida en el siglo XVII en Perú, es conocida por su distintivo estilo que combina elementos europeos y andinos, produciendo obras de profundo simbolismo religioso y cultural. A través de los siglos, este estilo ha mantenido su influencia en el arte devocional, y San Miguel se convierte en un tema central por su papel como protector y guardián espiritual. Este medallón, al ser una creación del primer tercio del siglo XX, captura ese legado artístico y devocional, sirviendo como una conexión tangible con la tradición y el fervor de las generaciones pasadas.