Fascinante calculadora Brunsviga 13K en impresionante estado de conservación y perfecto funcionamiento. Esta sólida máquina fue fabricada en Alemania en la década de los 50, y se presenta acompañada de su funda guardapolvo original. La calculadora está en un estado de museo, como si no se hubiese utilizado apenas a lo largo de sus muchas décadas de existencia. La funda que la acompaña está también en unas condiciones impecables; en conjunto, se trata de una pieza de museo digna de pertenecer al más ambicioso de los coleccionistas. Esta bella calculadora lleva carcasa de metal esmaltado en gris dorado con acabado martelé. Los dígitos pintados junto a las palancas son negros, mientras que las piezas de baquelita muestran un atractivo color granate. Las piezas móviles son de metal plateado y se muestran brillantes y lisas. A la izquierda de las palancas de los dígitos podemos ver el nombre BRUNSVIGA en letras en relieve, realizadas en metal plateado sobre esmalte granate. En la parte posterior de la máquina hay también una placa cuadrada en la que aparece el nombre de las empresas OLIMPIA WERKE AG y BRUNSVIGA WERKE. Esta placa nos revela que la calculadora fue fabricada entre 1957 y 1959, años durante los cuales ambas empresas estuvieron fusionadas. Tan atractiva como funcional, esta impecable calculadora antigua está destinada a pertenecer a un amante de las antigüedades mecánicas más especiales.
Historia de las calculadoras Brunsviga
La historia de las calculadoras Brunsviga comienza en 1892, cuando la firma Grimme, Natalis & Co, fabricante de máquinas de coser, empieza a producirlas tras la adquisición de la patente de los aritmómetros Odhner por parte del ingeniero Franz Trinks. Del 1892 hasta el 1957 se fabricaron diferentes modelos de calcualdoras Brunsviga, entre los cuales destacan el modelo B (1893-1927), el modelo M (una versión reducida del anterior), la Trinks Arithmotype (1910), primera y única calculadora con el sistema Odhner que imprimía el resultado, y la Trinks-Triplex (1911). Durante los años de existencia de la compañía se llegaron a fabricar alrededor de 500.000 ejemplares. En 1959 la fábrica de la Brunsviga fue absorbida por la Olimpia Werke, fabricante de máquinas de escribir; a finales de los años 60 la producción llegó a su fin. El funcionamiento de las calculadoras Trinks-Brunsviga se basa en el mecanismo de molinete, desarrollado por W.T. Odhner a finales del siblo XIX a partir del aritmómetro que Leibniz inventó en el siglo XVI.