D-923
Fantástica calculadora antigua Thales B en funcionamiento. Tapa de madera original con llave. Pieza con encanto.
Fantástica calculadora antigua Thales B en funcionamiento. Tapa de madera original con llave. Pieza con encanto.
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Máquina de Calcular Antigua Thales Modelo B. Alemania, Circa 1915
Fantástica calculadora antigua Thales B en funcionamiento. Tapa de madera original con llave. Pieza con encanto.
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Bonita Máquina de Calcular Antigua Thales Modelo B. Alemania, Circa 1915
Bonita máquina de calcular antigua Thales modelo B, fabricada en Alemania circa 1915 y en buen estado de conservación. La calculadora funciona bien y permite realizar las cuatro operaciones aritméticas básicas con una operatividad fluida y suave. La carcasa de metal que esconde el mecanismo lleva un acabado esmaltado en negro, original de época y con algunos retoques posteriores. A la izquierda podemos ver el logotipo de Thales en letras grabadas y esmaltadas en blanco, en disposición diagonal. Las letras y los números conservan aún gran parte del esmalte blanco y rojo original de la época. En la esquina inferior derecha encontramos el número de serie 13431 grabado en la base de acero. La calculadora se alza sobre un tablero de madera de roble, que se conecta con la tapa de chapa curvada a través de la cerradura y la llave originales (en funcionamiento). La tapa conserva el logo con la marca Thales en letras doradas, en buenas condiciones.
Los amantes de las calculadoras de época sabrán apreciar esta bonita máquina de calcular antigua Thales modelo B, una pieza icónica que a día de hoy sigue siendo totalmente funcional.
Historia de las Calculadoras Thales
Las calculadoras Thales se comenzaron a fabricar en 1911, cuando Emil Schubert, encargado de la compañía Triumphator-Werke, decidió fundar su propia empresa de máquinas de calcular junto con L. Haberer. Sin embargo, el éxito de las calculadoras Thales se debió en su mayor parte a Max Mueller, un hombre con gran talento para los negocios. En 1933, Mueller fue condenado por malversación y dejó la empresa, y solo tres años después el partido nazi obligó a Schubert a abandonar también la compañía sin llevarse las patentes. Tras la Segunda Guerra Mundial Max Mueller volvió a liderar la firma Thales-Werke, esta vez ubicada en Rastatt. Sus calculadoras volvieron a ser un éxito de ventas y se mantuvieron en el mercado hasta finales de los años 60, cuando la empresa cesó la producción.