Esta sobria, elegante y valiosa condecoración es la Placa y Cruz de Cuello (Categoría Comendador) de la Orden de Alfonso X el Sabio. La condecoración consta de dos piezas: la Placa y la Cruz de Cuello, en Categoría de Comendador. Están ambas elaboradas en plata maciza de gran calidad, con una atención al detalle fuera de lo común. Además, la plata está decorada con esmaltes de distintos colores: blanco, granate, azul y rojo, que realzan la belleza de los motivos. La cruz tiene cuatro brazos lobulados decorados con finos motivos granates sobre negro, y en el centro hay un círculo que acoge la figura simbólica del rey Alfonso X. El rey sostiene en una mano la figura de un águila, y en la otra una esfera coronada con una cruz que simboliza el mundo. Está rodeado por una franja blanca circular con la inscripción Alfonso X el Sabio, Rey de Castilla y León; los símbolos de estas tierras aparecen precisamente en el manto del monarca. La Cruz de Cuello pende de una banda de moaré en color rojo, y el enganche que une ambas piezas está elaborado en oro macizo y diamantes. La Orden de Alfonso X el Sabio está destinada a galardonar los méritos contraídos en los sectores de la educación, la ciencia, la enseñanza o la investigación a personas y entidades españolas o extranjeras. Es, pues, una condecoración al saber y al estudio. Un valor añadido para esta bella condecoración, que realmente constituye una parte de la historia de España y que a su buen estado de conservación une la alta calidad de sus materiales y la belleza de su manufactura. Medidas de las piezas: Placa: 79 cm alto. Cruz de cuello: 56 mm alto.