Rallador de cocina con pinza de sujeción, procedente de Alemania y fabricado en hierro fundido a principios del siglo XX. Se trata de una pieza de gran calidad, con un tamaño considerable y que conserva todas sus partes originales. El rallador está muy bien conservado y es altamente decorativo, mostrando una estructura profusamente decorada con grabados y celosías en el hierro. El mecanismo está realizado en chapa de metal y la pieza destinada a empujar los alimentos es de madera de haya maciza. La empuñadura de la manivela es también de este mismo material.El cuerpo de hierro, sólido y resistente, está esmaltado en color granate. El acabado se encuentra en muy buenas condiciones y conserva todavía trazas del esmalte dorado que enfatizaba los relieves. La pinza que sujeta el aparato a la encimera o mesa lleva en su parte frontal un mascarón con la inscripción TRITON. Esta pieza se une al resto del rallador mediante dos elementos de hierro en forma de morenas o tritones, con sinuosos cuerpos llenos de escamas y fauces abiertas. La manivela también representa uno de estos animales. La parte superior del rallador, que esconde el mecanismo de cuchillas, es un medallón con forma de flor de seis pétalos. Cada pétalo lleva grabada en su interior una vieira.Sobre el cuerpo de hierro se alza una caja realizada en chapa de metal y de forma rectangular. La caja lleva grabada la inscripción Varietas en relieve, en uno de sus lados. Esta caja es por donde se introducen los productos a rallar, que han de presionarse con la pieza de madera provista de un pomo negro. Al girar la manivela el cilindro con cuchillas va rallando los productos, que caen por la parte posterior del aparato en un recipiente colocado sobre la mesa. Se trata de un dispositivo sencillo e ingenioso, que a día de hoy resulta tan funcional como cuando fue concebido.La belleza decorativa y la funcionalidad de este fantástico rallador vintage lo convierten en una pieza llena de encanto y de interés.