El molinillo de café que podemos ver en estas imágenes es una pieza rara, muy interesante. Se trata de un molinillo de gran tamaño, que probablemente fuera empleado en algún comercio, tienda o almacén. Sus dimensiones hacen improbable que fuese destinado a uso doméstico, encontrándose por lo demás en excelentes condiciones. El sencillo mecanismo funciona a la perfección, y aún a día de hoy este molinillo podría utilizarse para moler café como se hiciera antaño. También es una pieza muy decorativa con una gran antigüedad, ya que data de principios del siglo XX.El molinillo está realizado en hierro fundido y conserva todas sus partes originales. El cuerpo inferior aloja un pequeño cajón de madera de haya maciza, destinado a recoger el café una vez molido. El cajón está bien conservado y lleva aún el acabado protector original. La empuñadura de la manivela es también de la misma madera. El mecanismo de hierro es muy atractivo, formado por sólidas y delicadas piezas que engranan perfectamente unas con las otras. El sistema funciona muy bien, y las piezas se deslizan con suavidad y precisión.La parte superior del molinillo está formada por un recipiente compuesto por dos semiesferas, en el cual se depositan los granos de café a moler. Este recipiente se alza sobre la parte inferior del molinillo, que contiene el cajón de madera y a la cual se halla sólidamente soldado. En las cuatro esquinas del cuerpo inferior podemos ver las letras P, D y B y el número 1, reproducidos en relieve e inscritos en círculos. Las iniciales P y D corresponden al nombre alemán Peter Dienef. Por su parte, el mecanismo interno del molinillo está en buen estado y funciona muy bien.De gran tamaño y estética industrial, este antiguo molinillo de café será la pieza estrella de una cocina rústica o de una buena colección.Medidas: Ancho: 31 cm. Alto: 33 cm.