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Espectacular colección antigua de platos de porcelana KPM. Pintados a mano con delicados dibujos de flores, todas distintas. Perfectos.
Espectacular colección antigua de platos de porcelana KPM. Pintados a mano con delicados dibujos de flores, todas distintas. Perfectos.
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Colección de 24 Platos Antiguos de Porcelana KPM. Flores. Berlín, Alemania, 1913.
Espectacular colección antigua de platos de porcelana KPM. Pintados a mano con delicados dibujos de flores, todas distintas. Perfectos.
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Colección de 24 Platos Antiguos de Porcelana KPM. Flores. Berlín, Alemania, 1913.
Impresionante y bellísima colección de 24 platos antiguos de porcelana KPM con motivos de flores. Los platos proceden de Berlín y fueron fabricados en 1913. Todos ellos se encuentran en perfectos estado de conservación: su belleza se muestra intacta, mostrando el magnífico trabajo de los artistas que los realizaron. Los platos están decorados con imágenes de flores pintadas a mano, todas ellas diferentes y con un grado de atención al detalle que sorprende y abruma. Cada uno de los platos lleva el sello de la porcelana KPM correspondiente a la época: un orbe con una cruz (ambos impresos y en color rojo) y un cetro azul pintado a mano. Algunos de los platos llevan también la marca del 150 aniversario de la fábrica, con los años 1763-1913, y también hay piezas numeradas.
Los platos están fabricados en la famosísima porcelana blanca de KPM, que llegó a ser conocido en la época como “oro blanco”. La porcelana se encuentra intacta, sin desperfectos ni manchas. Cada plato lleva un reborde en relieve dorado, con delicadas y caprichosas volutas. El oro intenso crea un espectacular contraste con el delicado fondo blanco y aumenta la importancia de los motivos florales. Estos motivos son ya de por si verdaderas obras de arte: delicadas imágenes realizadas con todo detalle y una amplia gama de colores que representan flores de distintos tipos. Las veinticuatro imágenes son diferentes entre sí. Llama la atención el magnífico trabajo del pintor, pleno de pinceladas libres y firmes, cientos de matices tonales, luces y sombras y detalles minúsculos. Estos platos son piezas muy buscadas por los coleccionistas y pueden alcanzar los 900 euros por unidad. Este dato nos da una pista de la enorme calidad y el valor de esta colección, que actualmente tiene más de un siglo de antigüedad y sigue conservando su impresionante belleza, así como su aristocrático estilo.
Esta maravillosa colección de 24 platos antiguos de porcelana KPM con motivo de flores, totalmente original de época y en perfecto estado, está destinada a deslumbrar en la vitrina o la mesa más espectaculares.
Medidas: Diámetro de los Platos: 21,5 cm.
KPM. Historia de una Porcelana Real
Las siglas KPM corresponden a Köningliche Porzellan-Manufactur, una empresa dedicada a la fabricación de piezas de porcelana fina ubicada en Berlín. La firma fue fundada en 1763 por el rey Federico II de Prusia, quien adquirió la fábrica a Johann E. Gotzkowsky cuando entró en bancarrota. El rey prusiano admiraba la magnífica porcelana creada en sus instalaciones, conocida como “oro blanco”: un material finísimo y traslúcido que se podía equiparar a la mejor de las porcelanas chinas. La corona invirtió grandes cantidades de dinero en la empresa e incluyó el emblema del cetro real en el sello. Al mismo tiempo, Federico II encargó una gran cantidad de piezas de porcelana KPM para el Palacio Real.
Desde los inicios de la firma hasta la abdicación del emperador Guillermo II, sucedida en 1918, la empresa pasó por las manos de siete gobernantes. A lo largo de los años, la porcelana KPM reflejó las modas y las tendencias, así como los gustos de la realeza prusiana. En la década de los 60 del siglo XIX, los avances tecnológicos derivados de la revolución industrial contribuyeron a modernizar los medios de producción de la fábrica. Sin embargo, la firma KPM mantuvo su apuesta por el trabajo artesano y siguió creando piezas únicas, fabricadas a mano y que reflejaban el talento de los artistas que las realizaban.
En 1918, la empresa pasó a manos del Estado Alemán. Ya en el año 2006 KPM fue adquirida por el banquero alemán Jorg Woltmann, quien por primera vez privatizó la fábrica. Desde entonces hasta nuestros días, la firma ha abierto varias galerías en Alemania y ha ampliado el mercado internacional para sus piezas.