Este maravilloso reloj de sobremesa antiguo, fabricado en bronce, es una pieza que procede de Francia y está fechada en el siglo XIX. Se trata de un impresionante artículo con maquinaria Japy Freres y sonería de horas y medias. El reloj lleva péndulo de sol visto, con un precioso diseño que representa la cara de un querubín rodeada de rayos de luz. Los rayos tienen distintas longitudes y dan lugar a una encantadora composición asimétrica. La maquinaria del reloj ha sido totalmente puesta a punto, y a día de hoy funciona perfectamente.En dicha maquinaria encontramos un sello circular con el nombre de la firma fabricante, JAPY FRERES. La empresa relojera se fundó en 1771 en Beaucourt, Francia, de la mano de Georges Frederic Japy. Además de relojes de sobremesa como el que vemos en las fotos, la firma también manufacturaba juguetes, candados, cadenas y utensilios de cocina, entre otras cosas. Con el tiempo el negocio fue creciendo, llegando a contar con alrededor de 300 empleados en sus momentos álgidos. Tras más de doscientos años de actividad, la empresa (que siempre fue un negocio familiar) cerró sus puertas en el año 1933.Si la maquinaria de este reloj llama la atención por su calidad y precisión, la caja de bronce no se queda atrás. Su diseño de estructura piramidal es ligero y airoso, formado por molduras, hojas, formas y relieves que se disponen de forma simétrica y equilibrada. La caja no es cerrada sino que muestra un gran número de huecos y ventanas, creando una hermosa filigrana de bronce. La parte trasera lleva una reparación que no se ve desde el frente. En la parte delantera, bajo la esfera formada por números romanos negros sobre fondo blanco vemos un atractivo mascarón que se alza como el protagonista del diseño. La esfera está protegida por un panel circular de vidrio, original de época. La elegancia y la calidad de este fantástico reloj de sobremesa lo convierten en una pieza de primer orden, tan hermosa como antigua. Medidas: Ancho: 37 cm. Alto: 47 cm.