Precioso y original teléfono de sobremesa, fabricado en baquelita color blanco hueso en los años 40 del siglo XX. Este teléfono procede de Alemania y se encuentra en excelente estado de conservación. Además, se puede conectar sin problemas a la línea doméstica y funciona perfectamente con redes no digitales. El teléfono tiene un diseño sobrio e intemporal que se ha convertido en todo un icono de la primera mitad del siglo XX, permaneciendo tan bello y decorativo como cuando se construyó. Su color blanco hueso es muy original, diferenciándose en gran medida de los diseños más clásicos, habitualmente de color negro.El teléfono conserva sus cables, mecanismos y piezas originales, y todos ellos están completamente operativos. La pieza del auricular y el micrófono va conectada al cuerpo del aparato mediante un cable antiguo forrado de tela, mientras que el teléfono se puede conectar a la red a través del cableado original. Sin embargo, este modelo ha sido convenientemente adaptado para poder utilizarse como el primer día. La baquelita color hueso está muy bien conservada, mostrándose lisa y brillante y sin roturas ni arañazos.En la parte frontal, el teléfono muestra el disco perforado para efectuar las llamadas. Se trata de una pieza de diseño básico y sencillo, que a través de las aberturas circulares deja ver los finos números impresos en color verde. Los mismos números se repiten, esta vez en menor tamaño, en el propio disco, como suele ser habitual en el diseño de este tipo de aparatos. Si damos la vuelta al teléfono, en la placa que cierra la base podemos ver una serie de inscripciones que indican el modelo (W 48), lo que parecen ser las patentes y dos logotipos: uno con un triángulo que contiene la letra K y otro con una corneta esquemática y el número 75, en color rojo.Este precioso teléfono es una pieza altamente original, perfecta para formar parte de la decoración de un elegante salón de estilo retro contemporáneo.