Original estación telegráfica Morse, fabricada en el año 1880. Con diseño empotrable, está pensada para ser insertada en una mesa. Fabricada en madera (la base es de roble macizo) con mecanismo de latón, es un objeto lleno de encanto que nos habla de la época de las primeras telecomunicaciones. La estación funciona perfectamente en el aspecto mecánico, sin haber sido testada eléctricamente. Se presenta casi completa, faltando únicamente el depósito de la tinta. En la base aparece grabado el número de serie: 2212.La caja vertical, fabricada en chapa de caoba, ostenta en la parte superior central una pantalla con escala graduada y aguja. Bajo ella aparece una placa de metal lacada en negro y con una inscripción en alemán que indica la marca (Czeija, Nissl & Co.) y la ciudad (Wien - Viena). La madera presenta pequeños roces y muescas en el barniz que pueden restaurarse sin problemas. Esta caja va fijada a un lateral de la base, mientras que en el resto de su superficie se distribuyen los distintos mecanismos, entre los que se encuentran la llave y los rodillos.El mecanismo en general muestra un excelente estado de conservación y perfecto funcionamiento. El metal está pulido y bruñido, y sólo muestra ligeros signos de desgaste y roce producto de los años y el uso. Sobre la caja de latón hay una tapa deslizante que muestra los engranajes, perfectamente conservados. En la base de madera podemos ver un pequeño cajón que, al abrirse, muestra un mecanismo circular. Un completo conjunto de detalles llenos de interés que dan vida a este precioso telégrafo del siglo XIX, cuya presencia será el broche de oro para cualquier colección de antigüedades industriales.Medidas de la estación telegráfica: 530 mm ancho x 250 mm alto.